martes, abril 17, 2007

Estormi ueder


Terror me dió esta tormenta de hoy. Estaba atendiendo a una señora y de repente se iluminó todo el consultorio con una luz de terror clase B. Pensé que ella se iba a convertir en mosca y yo en Frankenstein pero no, éramos las mismas sólo que ahora estábamos asustadísimas.

Mi consultorio está muy alto y tiene una gran ventana que da al espacio. Parece una cabina de avión: no se ve nada delante ni abajo, sólo el cielo y a la noche la negrura y las estrellas. Bueno, hoy estuve todo el día sumergida en plomo líquido, en un cielo gris venenoso sin matices, sólido, amenazante, desde las dos de la tarde hasta las seis, cuando explotó en mil pedazos. A las siete vino un paciente nuevo, un ingeniero en electrónica, un chiflado muy gracioso. Yo estaba aterrorizada con el cielo relampagueando a mis espaldas y la lluvia pegando cachetazos en el techito de poliuretano y contra los vidrios. Él hablaba y yo pensaba en la gente que estaría refugiada en las estaciones de subtes y en las guardias de los hospitales, en los nenes asustados arrinconados en casitas precarias, en los pajaritos desesperados viendo cómo se volaba su nido, sus huevitos, sus pichones. Le dije al paciente que tenía mucho miedo. Yo quería parar y que se fuera y encerrarme en mi cuarto acurrucada en la cama con un libro. Él empezó a explicarme los fundamentos eléctricos de los rayos y de repente se cortó la luz. Yo salté para ir a levantar la térmica y él me siguió, avanzó hasta la cocina, donde están los tableros. Qué nervios, le dije que no se preocupara, que levantaba la fase y volvía, pero el corto seguía, asi que llevé seis velas y seguimos la consulta como en El Nombre de la Rosa, y curiosamente el tipo se aflojó y me contó cosas muy íntimas, dolorosas, que nunca había contado. Era una situación como de confesionario, de trinchera, algo raro; parecía que en el mundo no quedaba en pie más que ese consultorio chiquito apenas iluminado por las velas. Yo estaba asustada pero él necesitaba contar lo que le pasaba y a pesar del susto pude ayudarlo muy bien. Era como si me desdoblara, una con miedo y otra no, pero ninguna de las dos estaba tranquila. Quería ir a ver cómo estaban Alonso y Vicente y si los grillos tenían comida, quería hablar con los chicos para saber dónde estaban, si se habían mojado, si había tomates para la noche, no sé, me agarró un ataque de preocupaciones domésticas y quería ponerme a llorar pero no podía. Sin pensarlo me puse a contar el tiempo entre los relámpagos y los truenos. Eso es algo que mi papá me enseñó cuando era chica. Yo les tenía terror a las tormentas violentas con viento y electricidad y él me explicó por qué había relámpagos, qué eran los rayos y por qué sonaban los truenos. Me dijo que cuando viera un relámpago contara los segundos hasta oír el trueno, que multiplicara por 3, creo, o por 30, no me acuerdo, y que eso daba la distancia en kilómetros a la que había caído el rayo. Me dijo que las tormentas se mueven y que así podía saber dónde estaban y para dónde iban. Me acuerdo de noches enteras despierta contando con los dedos los segundos entre la luz y el sonido y calculando que la tormenta se acercaba, que ahora estaba encima de nosotros, que ahora se alejaba. Eso, como todo lo que mi papá me enseñaba, me daba tranquilidad. Entender, medir, localizar la tormenta me hacía sentir protegida.
Mi papá decía que a los chicos no hay que empujarlos ni embretarlos, que hay que ponerles un tutor, un palo fuerte al lado como a los arbolitos para que puedan agarrarse y no torcerse ni caerse. Decía que los chicos, como los arbolitos, se agarran solos si lo necesitan. Él me enseñó la lógica de las tormentas, me enseñó a entenderlas y así aprendí a no tenerles miedo. Mi papá era mi guardián en el centeno. Pero ahora me volvió el miedo a las tormentas y al viento porque hace mucho que no lo veo.

36 comentarios:

  1. Anónimo11:20 p.m.

    ememe: me dieron ganas de tener un papá como eltuyo, y que me enseñe las maravillas de la naturaleza; no lo tuve ni en cuerpo y ni hablar del espíritu de ese increible ser... pero de todo hay que rescatar; que quedo una fibra POTENCIADA SOBRE LA TIERRA, y que me emocionas y me das más seguridad sobre lo que se trasmite a los hijos.. y es acompañarlos, compartir y sobre todo AMARLOS. GRACIAS

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  2. cuando estaba por desatarse uno de esos tormentones como el de ayer, mi papá me llevaba a la terraza. subida a una barandita que daba al vacío me tenía fuerte. yo miraba el cielo negro bien lejos, y los rayos y relámpagos iluminándolo todo. el temporal se acercaba lento. podía sentir la electricidad en el cuerpo.

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  3. mire, a mi se me corto la luz y se me pudrieron las milanesas de soja, pero su historia me hizo lagrimear.

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  4. ememe,
    leo tu post y me dan muchas ganas de llorar.las tormentas me dan un miedo terrible. cada vez que se larga, mi papá me llama para ver dónde estoy. ayer quedé sitiada en un bar en pacífico durante dos horas. más tarde fui a la casa de mi papá, él me esperaba en la puerta con dos paraguas.
    ya no llovía.

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  5. Anónimo10:30 a.m.

    Ememe,

    Fue una tormenta horrible, apocalíptica. Nunca escuché tantos truenos seguidos. Caminé empapado varias cuadras y lo único que quería era llorar y llegar a casa.

    Me encanta la serie de mi apá.

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  7. Con lo del guardián en el centeno, ¿aludís al libro de Salinger, supongo? El título fue también traducido aquí como "El cazador oculto", que me gusta más. Pero nunca alcancé a entender que quería decir Salinger.
    De paso, en el béisbol, catcher es el tipo que está detrás del que batea, para atrapar la bola si éste falla. En el centeno, porque está parado sobre una caja llena de centeno. No sé si eso le puede dar otro sentido (el de alguien que está agrazapado detrás para aprovechar nuestro error).

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  8. Avanzaba el bondi a encontrarse con la tormenta (iba de capital a provincia) y las gotas se iban inflando, la oscuridad impedía leer para acortar el viaje, la luz enferma del 37 se empezó a mezclar con los relámpagos y si, daba miedo

    qué lindo cuando hablás de tu apá, lo mas cercano que tengo a eso es mi abu, pero le tiene terror a las tormentas

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  9. crab,
    el cazador oculto es una mala traducción. No se trata de un cazador sino de alguien que está alerta para proteger a otros. Y está oculto en el centeno porque no quiere ser visible, no quiere interferir en la libertad de los demás. Leelo.

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  10. Anónimo12:38 p.m.

    Tormenta loca.
    Tarce varias horas en llegar a casa.
    Encierro en subte.
    Relampagos increibles.
    Me gusta mucho la filosofia educativa de Padre.
    Cariños
    A

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  11. Anónimo12:39 p.m.

    El cazador oculto...quien traduce?
    Me dieron ganas de leerlo de nuevo.
    Cariños
    A

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  12. Anónimo12:53 p.m.

    Lo maravilloso es que a pesar del susto, pudiste ayudar a ese paciente nuevo.
    Me encanta cuando nos contás de tu apá, es una figura tan presente, casi casi es posible verlo.

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  13. Anónimo5:41 p.m.

    traduce Manuel
    Méndez de Andés
    un seguro seudónimo
    en fabril editora
    ¿dónde van los patos
    del Central Park
    en invierno?

    Hipólita

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  14. Creo que más allá de la lógica de las tormentas, es el amor el que nos saca el miedo, ¿no? O si se quiere, la verdad confiable, la lógica que nos transmite el que sabemos quiere que estemos bien.

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  15. Anónimo8:49 p.m.

    Ememe: yo también pensé en mutaciones, como la mosca y la frankestein. Cuando paró la tormenta y salí vi varias alcantarillas de electricidad de las que salía un humo aterrador. Nos imaginé a todos convirtiendonos en tortugas ninjas y cosas peores.

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  16. Anónimo6:31 a.m.

    Emme,

    Como Holden Cauldfield, aun a pesar de las heridas, o quiza justamente por ellas, velas por los que queres y tenes cerca, humanos o animales. Y por los que te leemos tambien. Tenes el alma grande.

    Cuando era chica cuando habian rayos me metia en la cama de mi hermana... cinco años menor que yo.

    Ahora a veces me gusta mojarme, pero sobre todo pienso que es bueno que llueva, se limpie la ciudad, se bañen los arboles y plantas y crezca el pastito.

    Y tambien pienso como destruye el agua. Pero esta bueno cuando reaccionamos y ayudamos a los otros que quieren recibir ayuda.

    Feliz Jueves.

    Besos,

    Annie

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  17. Hipólita: tan buena es esa traducción que cuando cuenta sobre el postre que dan en el colegio, dice: "budín de pan, que solo comían los de primer año, que no tenían concepto formado", que mejora el original, que no dice exactamente así.
    MM: voy a confrontar, no tengo ahora el libro aquí. Pero en el libro se menciona una sola vez el título, y no es esa la idea que me quedó. Además, no te podés ocultar en el centeno: no es tan alto.
    Te cuento.

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  18. Anónimo9:36 a.m.

    El tipo espera agachado en el centeno.
    Traducir:The catcher in the rye,como:El cazador Oculto.Simplemente no da.Para eso que nos de su interpretacion y todo.
    A mi cuando mejoran algo..me da no se que.
    Cariños
    A

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  19. Anónimo11:54 a.m.

    A mí también me da no sé qué esto de 'mejorar'. Mejor según la idea del traductor, que no necesariamente tiene que ver con la intención del autor.

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  20. Anónimo12:05 p.m.

    yo espero acá
    la traducción de crab
    de la escena en que Holden
    es catcher in the rye

    Hipólita

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  21. Anónimo12:07 p.m.

    ¿Mendez de Andés
    no será José BIanco?

    Hip

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  22. Anónimo12:08 p.m.

    Bianco
    no blanco
    aunque blanco
    de algun modo

    Hip

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  23. Anónimo12:12 p.m.

    encuentro data
    de Méndez de Andés
    murió antes
    de que Holden nazca
    salvo que sea Borges
    nadie puede traducir
    nada antes
    de que se escriba

    Hip

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  24. Anónimo12:16 p.m.

    me gusta esta data
    de méndez andés:
    nombre de calle de
    El juguete rabioso
    seguro será en Flores
    ¿hay quien la conoce?

    (Hay que pararse
    agradecer a dios y brindar
    cuando se lee o escucha
    la palabra "Arlt")

    Hip

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  25. Anónimo12:19 p.m.

    esta mañana
    no he hecho nada
    más que comentar
    aquí y acullá
    tengo un brote
    de sin goyete
    antiproductivo
    lucho humildemente
    contra el capital

    Hip

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  26. Anónimo12:20 p.m.

    Me suena Mendez de Andes en Flores...y no se bien si mi mente la recuerda cortando(penetrando salvajemente en realidad)a la muy puta Avenida Directorio.
    Cariños
    A

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  27. Anónimo12:21 p.m.

    nunca voy a dejar de luchar contra el capital y contra los infieles.hamas.el dios detras del dios detras del dios del dios dios dios...
    Cariños
    A

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  28. Anónimo1:10 p.m.

    en el blog de ememe, como si lo mucho fuera poco, ahora también se teoriza la traducción.

    carolain

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  29. Anónimo4:31 p.m.

    Este blox,siq uieren mi opinion,es un juntadero de vagos importante.
    Comienzo mi lista con el señor Crab.
    Cariños
    A

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  30. Si, queda en Flores, la vi.

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  31. A: Sé que somos amigos. Así tomo tu comentario. Aunque ¿quién es más vago, quien hace 7 comentarios o quien hace sólo 2?
    Como sobre la traducción habría que extenderse un largo rato, y sería abusar de MM y su espacio, invito a Hipólita quienes se interesaron en el tema a ver mi interpretación en mi Blog, y si quieren la seguimos ahí.

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  32. Anónimo12:53 p.m.

    Yo soy un vago.Es un elogio para mi!
    El dia que lo asumi,fue genial.Queria festejar pero me dio paja.
    La inspiracion por arriba del sudor.
    Ese podria ser mi lema.
    Cariños
    A

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  33. Anónimo1:46 p.m.

    Ocho, ahora. Se ve que no tenés nada que hacer...

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  34. Anónimo1:47 p.m.

    Nueve.Nunca hago nada.Nunca hice nada.
    Cariños
    A

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  35. Anónimo2:06 p.m.

    un día voy a escribir un libro que se va a llamar "elogio de la vagancia". la vagancia es productiva.

    carolain

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