martes, mayo 25, 2010

Amo Pandemia

Lo miro y le acaricio la tapa. Después lo abro y lo huelo. Tiene ese olor a tinta que te emborracha de los libros nuevos. El diseño es una hermosura: unos virus cianóticos que vuelan a cámara como gotitas de Pflugge escupidas por un acatarrado. En la foto de la solapa tengo un lifting y un botox que me hacen parecer una prima mía más joven y con una vida regalada en un país de esos que hasta hace seis meses eran ricos y prósperos.

Lo escribí lindo. Siempre quise escribir divulgación científica en lenguaje literario. En junio firmé el contrato y cobré un adelanto para entregar el original el último día de febrero. Eso te da vértigo y te compromete. A mí me vino bien porque si nadie me espera puedo divagar durante años creyendo que estoy concentrada trabajando y en realidad soy como un molino a toda velocidad moliendo agua.

Bueno, trabajé como una perra. Cerré el block, dejé de leer, archivé los otros proyectos que había empezado a escribir y reduje todo el resto a su metabolismo mínimo: pocos amigos, poco cine, poco sueño, actividad abuelar restringida, cero cocina y mucho delivery. Investigué un montón y lo sumé a todo lo que tenía investigado desde 2003. Entrevisté a médicos que trabajaron como asesores y expertos en ministerios de salud y a otros que trabajaron en contacto directo con pacientes durante la epidemia. Entrevisté a directores de hospitales, sociólogos, directores de laboratorios y farmacéuticos. Amigos que viven afuera me mantenían al tanto de lo que iba ocurriendo en otros países. Mercedes González, genia de la investigación y los archivos, encontró en la Biblioteca Nacional un material que no conocían ni los médicos especialistas que coleccionan datos sobre el lado histórico de la epidemiología. Y en internet leí todos los días los diarios europeos para comparar las versiones de los periodistas de todo el mundo sobre las alternativas de las declaraciones de la OMS, las reacciones de los funcionarios, las estrategias de los laboratorios y la interna intrincada de la industria farmacéutica. Leí unos veinte libros sobre pestes, epidemias, el negocio de las drogas y profundicé lo que sabía sobre la espantosa epidemia de gripe de 1918. Fui a todos los congresos médicos y jornadas que hubo sobre el virus y los tratamientos.

Por si después de todo esto te da fiaca ir a la librería aunque sea para mirarlo, el índice dice:

1. Te estábamos esperando. Es un relato de por qué la aparición del virus no fue una sorpresa.
2. El big bang viral. Explica los pormenores de cuándo y cómo se ensamblaron las piezas del virus
3. Un enano militar. Es la descripción de lo que tenés adentro y de cómo funciona la inmunidad.
4. Amigos peligrosos. Describe la acción de los antivirales, los antibióticos y todas las drogas de las que abusamos todo el tiempo por presión de los laboratorios y los médicos.
5. La fase en cuestión. Desarrolla la historia de cómo fue cambiando a lo largo de los años el protocolo de la OMS para declarar la pandemia. Y oh sorpresa, no es como te hicieron creer.
6. Modelo 1918. Historia de la Gripe Española que se cargó entre 30 y 100 millones de personas en ocho meses.
7. La grippe nostras. Describe lo que pasó en la Argentina durante esa epidemia.
8. Diario del año de la gripe. Es un detalle de todo lo que sucedió en la Argentina: casos, decisiones acertadas, errores, reacciones sociales y manejos políticos.
9. Tan cerca, tan lejos. Relato de cómo se encaró la epidemia en otros países.
10. Mucho huevo. Capítulo dedicado a desasnarte sobre las vacunas (la de la gripe A y todas las demás)
11. Todos somos reptiles. Descripción de las reacciones individuales y sociales frente a las epidemias y los contagios.
12. La peste. Relato sobre otras epidemias que se vivieron en la Argentina: fiebre amarilla, poliomielitis, dengue y piojos.
13. Mesías y apóstoles. Gracioso capítulo en el que se transcriben y se analizan las hipótesis conspirativas más disparatas que surgieron durante la epidemia.
14. La segunda ola. Avance sobre lo que puede y no puede suceder más adelante.
15. Glosario. Sí, viste, hasta te escribí un glosario para desasnarte mejor.

No querrás el PDF también, no?




23 comentarios:

Anónimo dijo...

Y vamos todavía! Que bom que vc voltou.

Anónimo dijo...

Que vuelvan todos los comentaristas históricos.

He dicho.

Anónimo dijo...

Lo compro esta semana. Pero para ir ganando tiempo: la vacuna ni en pedo, no?
Mica

Au drey dijo...

"Divulgación científica en lenguaje literario": sos lo más!
Auguri e iré a por él!

Billy dijo...

Me quedé con las ganas de leerlo pero ahora ya no estoy en argentina. se venderá afuera?

Un beso!

Tête de P. dijo...

¡No estaría nada mal un PDF para pegarle una hojeadita!

Saludos

Anónimo dijo...

mónica, sos buena, buena, no me cansaré de decirlo, aunque hagas porpaganda de tu libro, porque seguramente también lo es él, en el sentido de la calidad, en el sentido de la bondad.

no dejes de ser buena y de escribir cosas así.

pero tampoco abandones más tu blog.

besos

Anónimo dijo...

felicitaciones ememe

Hip

EmmaPeel dijo...

Esa!! glorioso

Voy a chusmearlo (no me vacuno ni mamerta)

besos

Anahí Lazzaroni dijo...

Felicitaciones como ya dijo Hip.

Emma: Hacía mil años que no leía la palabra "mamerta".

Muma dijo...

Lo quiero!!! donde lo compro online?
Que bueno que lo terminaste, soy lectora antes anonima, ahora no, asi que esperaba con ansias tu vuelta :)

Anónimo dijo...

Que bueno volver a leerte, Ememe!

Felicitaciones!


Ana

myrna minkoff dijo...

La vacuna ni en pedo.

myrna minkoff dijo...

mamerta es casi como tarúpido. A que esa no la sabían?

myrna minkoff dijo...

Ana, Billy, Meki, Emma Peel, Hip, Anahí, Tête, qué lindo es volver a verlos!

Tête de P. dijo...

Myrnita: hoy en ACME de Arenales estuve hojeando tu libro. La foto está buena, saliste bien, nada que ver con lo que decías en éste u otro post.

Interesantes las fotos.

El CV de la solapa muuuuuy interesante.

Saludos!

Abrujandra dijo...

¿Se puede estar orgullosa así como estoy yo de vos? ¿Como si fueses mi hija que se recibe en la facu? ¿Queda mal?
Que te lleguen mis abrazos de agradecimiento y amor.

Anónimo dijo...

MM, sos tan genial, mañana me compro el libro.
Nosotros con Medone como médico y el infludo hace año y medio venimos todos bien (bebé de 15 meses, marido y yo, embarazada again).
genia! (avisame si necesitás los limones sin porquerías)
Julia

Anónimo dijo...

Mamerta y tarupida... esas eran mis hermanas, después de adolescente los que no me caían bien eran los "alimentados a gofio".
anónima ayer, hoy y siempre

Anónimo dijo...

"no sean tarùpidas!" asi nos decía la mamà de una amiga(ni me acordaba ya)
debe estar muy bueno el libro. felicitaciones!!
mili

Madame Lulu dijo...

querida y admirada myrna que alegría!

inés dijo...

bravo!

Lil dijo...

Estoy en Uruguay, lo podré comprar en algún lugar??