domingo, diciembre 02, 2007


Mi hija B2 es una de esas chicas lindas a las que los hombres les regalan peluches.
Vieron en el cine? Siempre hay una linda que va a un parque de diversiones con un tipo y el tipo tira al blanco y gana un oso panda de dos metros de alto y se lo regala a ella. Vuelven a la casa (ella acarrea el puto oso) y se dan un beso en la puerta. En general esas historias de amor del cine terminan mal. Debe ser por el efecto peluche, algo muy difícil de sobrellevar.
Por suerte ahora los hombres enamorados les regalan muñecos de globo a las chicas. Son más portables, más livianos y tienen una vida infinitamente más breve, lo que los hace menos patéticos si la historia de amor se acaba (Dios no lo permita). En cambio el oso panda de dos metros sobrevive a todo y es un recordatorio permanente de lo que iba a ser y no fue.
A B.2 le tocó una Pantera Rosa. Llegó a casa alborozada con ella. Lo que más le gustaba era que tenía "un ojito un poco desviado", pero en realidad era completamente estrábica. Como tenía un día típico (desde casa tenía que irse a un ensayo, después a comprar algo, después a la depiladora, después a ver a una amiga, después a cambiar un regalo, después a visitar a su papá y después a la función), dejó a La Pantera en casa, sentada sobre una canasta. Yo cerré el cuarto para no verla porque el arte de la globología en general me recuerda que el fin de la humanidad está muy cercano, pero igual, por pura perversión, todos los días abría la puerta y la miraba.

Al día siguiente tenía algunos miembros desinflados y al tercer día se le había dado vuelta la cara y tenía el hocico encima de los ojos. Al cuarto día se le salió una tripa, una especie de intestino globológico que cayó al suelo al lado de la canasta. Ya sin ese órgano su deterioro se aceleró, perdió otros miembros y se fue achicando. Ayer B.2 la vió y se puso muy triste. La quiso llevar a su casa pero le pedí que la dejara. Le prometí darle cuidados paliativos y le aseguré que no iba a dejar que sufriera. Mientras tanto voy documentando el proceso para ustedes, para que tomen conciencia de lo corta que es la vida.

6 comentarios:

Candelaria Frías dijo...

globos con forma que se deshacen. A vos el regalo de B 3 te remite a lo efímero de la vida, a mi me hace pensar en el amor. Por qué será que uno necesita inflarse esos globos rosas y darle formas? panteras rosas, leopardas...Por qué será que siempre se desinflan? Me da más tristeza que pensar en la vida breve.

myrna minkoff dijo...

Los globos son una metáfora, Can. Se desinflan como la vida, como el amor, como los músculos, como el culo, como las tetas... por eso te da tristeza.

Au drey dijo...

Qué susto, vi las fotos y así de golpe pensé que habías ido al sex chot sin nosotras!

myrna minkoff dijo...

meki,
de ninguna manera! No voy a esos lugares sin asesoras!

G&G dijo...

los peluches, además, acumulan ácaros...

Mascaró dijo...

¡Cuánto sadisnmo, MM! ¿Basta, No soporto más!