jueves, agosto 10, 2006

todas las Martas

Antes de empezar a atender leo la agenda del día. El nombre de algunos de los pacientes me provoca una inquietud desagradable. Hoy viene uno que es desconfiado y prepotente, que se queja de que nunca mejora pero sigue viniendo regularmente desde hace más de 10 años.

También viene una mujer rígida y frígida que se sienta derecha con la espalda separada de la silla y desenrosca una lista interminable como la de Don Juan pero no de amantes sino de quejas contra el marido y los hijos. El marido, militar retirado, es un pollerudo grave. La acompaña hasta la puerta del consultorio llevándole la cartera. Ella entra como un coronel, le quita la cartera y cuando se queda sola conmigo suspira y dice –Es un inútil...

Bueno, esos dos enturbian mi día de hoy. En la lista también hay un adicto, una suicida, una madre ansiosa, un nene asustadizo, una nena Hallo Kitty y dos que están muy graves. Todos esos me gustan y tengo ganas de verlos. Sé que me van a preocupar sus problemas y que me van a dar ternura o risa sus planteos.

Hace unos días uno de ellos me dijo muy serio –Todas las Martas son malas.

Le pregunté si lo creía en serio y me aseguró que sí, que él había hecho un muestreo bastante amplio y que el resultado era 100%: todas malas.

No lo atribuye a una cuestión generacional (no hay Martas menores de 40 años) ni a la posibilidad de que él esté sesgado por alguna razón y descarta que ese nombre pueda tener una influencia maligna sobre las mujeres que lo llevan.

Esas cosas me alegran el día y me hacen amar a mis pacientes. A todos menos a los que son antipáticos y a las que se llaman Marta.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Tengo una sobrina de 15 años que se llama Marta (y no responde al estereotipo "Martita"-caca) y la hija de Patricia Sosa que debe tener más o menos la misma edad también se llama Marta.
Yo que sólo conozco a mi sobrina también hice mis sesudos estudios sobre las muestras obtenidas y las Martas son maravillosas.

explorador54 dijo...

Mejor que vaya pensando en cambiarse el nombre, porque a partir de los 30 / 40 años se empiezan a poner jodidas.

myrna minkoff dijo...

No entiendo, usuario anónimo: si sólo conocés una Marta, que es tu sobrina, cuáles son las muestras obtenidas?
O se trata de muestras obtenidas de tu sobrina?

Anónimo dijo...

ea! yo me llamo marta y soy re buena =) tengo 20 años... siempre pense q mi nombre era de abuela (de hecho lo es porque por algo me llamaron así) pero lo llevo con toda la actitud, aguante !

Martula