jueves, mayo 10, 2007

Como en todo el mundo, los negocios chinos tienen gatos chinos que saludan para atraer clientes.


17 comentarios:

Anónimo dijo...

Con esta foto me acordé de tu Haiku No Michi.

myrna minkoff dijo...

era triste ese haiku y lo dejé mucho tiempo para que se entristecieran todos.

Anónimo dijo...

Es efectivo. Lo uso a veces cuando estoy al borde de entristecerme pero no puedo del todo.
De paso te cuento (nada que ver) que he buscado mucho tiempo, infructuosamente, a la vaca de Agüero y Berutti. Nunca la encontré. No sé si esa me iba a generar tristeza o alegría. Hoy volví a pasar, ya se debe haber ido al campo.

myrna minkoff dijo...

yo tampoco la ví ayer.
Descubrí que en todas las ciudades hay animales de papel maché o de goma eva, no sé, más grandes que el tamaño real, horribles y sin ningún sentido aparente. En Barcelona hay un camello medio chipodri en la entrada de una galería donde venden cosas punk. Cada vez que voy lo veo y me pone triste. También hay una jirafa blanca espantosa en la puerta de un negocio.

Unknown dijo...

me encanta el gatito de la suerte chino. es feliz.

cronista sentimental dijo...

gatos chinos, ni piensen en reemplazar al señor que duerme.

Anónimo dijo...

gatos.chinos, todos estamos tristes por haber dejado la carpa de los perros. menos el niño.vieja, que no se da vuelta, y nos da esa espalda apretujada y creciente de joroba. lo peor, nosotros la recibimos. qué feo es tocar esa esplada, gatos.chinos. ustedes no lo saben porque mantienen el brazo en alto. el niño.vieja no entiende el saludo, entiende stop. es que ustedes gesticulan en chino, gatos. ¿cómo el niño.vieja podría entenderlos? ¿cómo será el niño.vieja cuando sea viejo.vieja?

carolain

Anónimo dijo...

este lugar remite al haiku no michi, el lugar de estar triste. ahora puedo elegir entre el lugar en donde siempre es sábado, o el lugar donde siempre es triste (¿qué día será en ese lugar?). es un buen lugar para estar tres perros triste, o tres tristes perros. pronto todos se van a olvidar de ellos. como se olvidaron del señor que duerme, que está en el lugar donde siempre llueve.

me tocan el timbre, gatos.

carolain

Anónimo dijo...

al menos los gatos.chinos son de plástico no como los lagartos de ememe divina carolain que nadie reemplace al niño.vieja ni al señor que duerme no soportaria otro desdén el niño.vieja no llega a viejo.vieja está siempre en el mismo sábado

Hipólita

Anónimo dijo...

divian carolain estabas ahí y te tocaron el timbre yo no olvido al señor que duerme ni al niño.vieja ni a tí mi preferida carolain

Hipólita

Anónimo dijo...

los brazos de los gatos se parecen a las rodillas del niño.vieja: ya es algo

Hipólita

Anónimo dijo...

supongo que
es tiempo de
olvidar

Hipólita

Anónimo dijo...

estoy tan apurada que no llego a lo del niño.vieja. preferiría esconderme con él. estoy impresentable, gatos.chinos. que nadie me mire. y ahora mientras escribo, blah blah blah, voy a comer todos los alfajores havana que pueda.

bajen el brazo como rodilla de mi querido niño.vieja.

carolain

pd: cuidado que arriba están provocando a los albinos que seguro envidiarán el dorado tan bonito de ustedes.

Anónimo dijo...

yo acá y así. y todos, oh, gatos chinos, poniéndose elegantes para el 31.

carolain

Anónimo dijo...

El 31 no será perfecto, porque no vas a estar, Carolain.
Pero hay planes para cuando vengas, oh sí.

myrna minkoff dijo...

carolain,
cuando vengas hacemos otra!
En casa me cargan porque aprovecho cualquier ocasión para festejar, como Charles Aznavour. Señog shampañ, podrían llamarme.
Para morfar y chupetear todo me viene bien: a veces festejamos la Pascua judía y la cristiana un día detrás de otro para no perdernos ninguna. Ahora hace tiempo que no lo hacemos porque mi ex suegra (la mamá de M.3) que es la experta en pascuas judías, redujo su desempeño culinario a unos pocos gefiltefisch por año. Antes hasta rallaba el rábano picante para hacer el krein y hacíamos unas festicholas infernales.

Anónimo dijo...

sí, ememe, hacemos otra. cualquier religión me da lo mismo. en el cielo o el infierno, me es indiferente. yo como y bebo como el payaso de aira.

descansen, gatos chinos, hasta la próxima fiesta pueden bajar el brazo.