martes, noviembre 14, 2006

Bebitos

Leo uno de los textos más preciosos que he leído sobre la experiencia de tener un hijo. No todas las mujeres tienen la posibilidad de entregarse a ser un animal cuando tienen bebitos y me gusta mucho que MM la tenga y que lo diga así.
Cuando te pasa es la sensación más sensourround de la vida. Cuando me rozo sin querer un pezón me acuerdo de la sensación in-cre-í-ble que era darles de mamar a mis tres hijos. Chupan y te vas embora por ahí para siempre.
En la peli de Hannibal the Cannibal (no me acuerdo del nombre pero ustedes sí), hay una escena que lo dice todo: Hannibal le habla a la madre de la periodista que no aparece y le dice que mientras le está hablando de la hija que busca desesperada, ella puede sentir cómo le cosquillean los pezones como cuando le daba de mamar y sentía la leche subir y salir. Todavía ahora si oigo llorar a un bebe tengo esa sensación inquietante y terriblemente placentera, que es el impulso animalesco irracional de darle la teta para calmarlo.
Siempre me acuerdo de algo que me pasó hace mil años, cuando B.1. tenía dos o tres meses. Yo estaba en una comida muy paqueta con un vestido de seda verde esmeralda, y alguien dijo que yo tenía un bebito... y en ese momento empezó a manar de mis dos tetas un chorro, literalmente un chorro divergente de cada una como de una fuente, que tuve que atajar con servilletas! Fue un bochorno en ese momento, pero ahora me acuerdo y pienso que a los presentes no debe haberles parecido un papelón como a mí.
También me acuerdo de una foto vieja: escena en el Amazonas, mujer con taparrabos arrodillada dándole la teta a un jabalicito bebé que se había quedado huérfano. El jabalí bebé mamaba con fruición, estiradito. Claro que lo alimentaba para zampárselo cuando fuera grande, pero qué impresión que te mame un jabalí! Es el extremo del placer y el poder de alimentar con tu propia leche.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Llegue a casa y lo primero que hice fue abrir tu blog: saltee algunos y me quede leyendo y releyendo otros el de tu muerte: como no vas a sentirte la hormiga REINA; si lo sos... Y bebitos me parece lo más maravillosamente animal que todos tenemos.
y sobre los nieto (si vos queres: a mi me encantaría) que seas la abuela y le cuentes lo maravilloso que tiene la vida....