Otra cosa (la influencia de A es más angustiante que la de Borges), yo me quiero mudar a lo de ememe y su chico para comer rico, mi dios, y no esa sopa de vitina y la sibarita con la que me arreglaron anoche.
tommy, no te imaginás lo bien que lo pasarías. Ayer hubieras estado todo el día leyendo y escribiendo, picoteando queso con pimienta con pan de tomates disecados y un syrah bastante rico. Después te hubiera dado chipá guazú con una salchicha alemana a la plancha bien doradita y de postre apfel strudel tibio con helado de vainilla. A la tarde hubieras seguido haciendo huevo, tomando café o té verde y a la noche te hubiera dado paltas con tomates y milanesas con queso derretido y arroz con gengibre. De postre helado de chocolate amargo y de dulce de leche. Antes de irte a dormir, mientras seguís leyendo repantigado en un sillón, te daría una copita de grappa, o de amarula. En verano te daría muchísimas ensaladas deliciosas, pero en esta época te engordaría con esas delicias. Me encanta dar rico de morfar. Ayer lo pasamos así con mi chico y agregados esporádicos de hijos que se sumaban en el almuerzo o en la cena. Ahora me voy a caminar una hora para quemar por lo menos el 10% de las calorías de ayer.
Ese chico es muy afortunado, que no se descuide nunca, porque los que nos estamos anudando los cordones de los botines en el banco tenemos mucha hambre de gloria y de la otra, y por un apfel con helado a la hora de la siesta somos capaces de llenarle el bidón con valium.
Raku, es lindo tener un chico y es lindo darle la papa y que te la coma toda. Ana, va receta de chipá guazú. Es muy fácil: 2 cebollas, 4 choclos, media taza de queso recién rallado grueso, 100 gramos de queso mantecoso o muzzarella, 4 huevos. Rallar los choclos hasta llegar al Marlon Brando. Dorar en aceite de oliga las cebollas cortadas chiquitas. Unirles los granos de choclo crudos y darles una cocinadita leve. salar. Pimentar. Dejar enfriar. Agregar el queso rallado, el mantecoso cortado muy chiquito y las 4 yemas previamente batidas. Aparte, batir a nieve las 4 claras. Agregar al final. Poner todo en fuente baja muy enmantecada. Al horno mediano una media hora. Queda como un soufleé de choclos. Guazú quiere decir "grande"y chipá "chipá", como todos saben.
Ah, me olvidaba del arroz con gengibre. Es más fácil todavía: Cortar un buen pedazote de gengibre fresco como de 3 cms de largo.Pelarlo y cortarlo chiquito. Hacer lo mismo con un diente de ajo. Calentar aceite de oliga, echarle el gengibre y el ajo juntos. Dorar apenas. Poner dos tazas de arroz. Dorarlo un ratito (si algunos granos se queman es más rico). Echarles cuatro tazas de agua hirviendo y revolver bien. Sal y pimienta. Dejar que hierva destapado a fuego lento sin volver a revolver. Cuando la superficie está seca, es decir, cuando no quede agua visible encima del arroz (eso ocurre aproximadamente a los 10/12 minutos), tapar, poner el fuego al super mínimo y si hay, ponerle un disco de amianto o un difusor. Dejarlo así unos 5 o 6 minutos más, apagar el fuego y dejar tapado unos 5 minutos más. Destapar,ponerle aceite de oliga, revolvetear un poco. Se sirve enseguida o más tarde, recalentándolo en una sartén.
Todos los domingos elijo una receta de mi nuevo ídolo Martiniano, la recorto, y, haciéndome el distraído, la dejo al lado del anafe (esta palabra la aprendí la segunda vez que me mudé a la casa de la mujer que queremos tanto; la primera vez se esperaba y exigía menos de mí). Pero nada. El lunes a la noche, de nuevo albóndigas con arroz, y la mujer que que queremos tanto con sus verduritas y su botellita de Ser con té verde que me pregunta de nuevo: "¿En serio no te gusta el anco?"
Tommy, me hiciste acordar a algo que pasó en un grupo de psicoanálisis al que iba hace mil años. No sé por qué, casi todos los pacientes de ese grupo eran médicos. Había un psiquiatra y psicoanalista muy gracioso, una especie de woody allen gordo, que rezongaba porque su mujer (psicóloga, claro), cocinaba pescado y él odiaba el pescado. pero lo odiaba mucho, le daba asco verlo, olerlo, y no podía ni probarlo. la muy hija de puta insistía una y otra vez con distintos modelos y recetas de pescados y le interpretaba que su aversión se debía a un conflicto con el falo del padre. Finalmente, el tipo se enamoró de una vendedora de una boutique de Cabildo, se separó de la psicóloga y nos contaba lleno de felicidad que la nueva le cocinaba cosas ricas y por supuesto jamás lo persiguió con un pescado.
Anonymous, el éxito de un matrimonio no radica en lo rico que se come, sino en una fórmula química muy compleja que no pienso publicar. Y yo no mido el éxito de un matrimonio por la duración sino por el placer que les da a los dos.
Sonamos, ya veníamos mal y esta tarde la señora uruguaya que cuida al niño cuya filiación no viene al caso desde que era un bebé y me cocina las ya mentadas albóndigas con arroz tres veces por semana rodó por la escalera y hubo que llamar a la ambulancia y le recomendaron dos semanas de reposo absoluto. Y yo sé que habla muy mal de mí comparar mi modesto infortunio con tremenda desgracia, pero díganme si no es muy triste que esta noche el único plato que me esperaba era sopero y el líquido en su interior eran un montón de verduras amontonadas, licuadas e irreconocibles. No, no, no, yo mañana me mudo a Pedemonte. Existe todavía Pedemonte, existen sus costillitas villeroy? Que alguien se apiade y me mienta que me gusta.
tommy, creo que pedemonte todavía existe. Fui hace pocos años pero ya no es lo que era. El menenismo le pegó mal: se transformó en un lugar de nuevos ricos con corbata amarilla. Recién vengo de Oviedo, que aunque cambió y tiene unas bolas de opalina horrendas como iluminación, sigue siendo riquísimo. Hoy, parrillada de pescados: mini pedacitos de pescados jugosos por dentro y crocantes por fuera y langostinos doraditos. Con Syrah.
No me puedo ir a dormir porque estoy esperando que termine de hacerse el pan integral con semillas de lino. Calculé mal y en lugar de programar La Máquina para que lo tuviera listo a las 8 la programé para las 2 de la mañana. Si lo dejo cocinado y encerrado se humedece y se achota. Mientras escribo huelo el olor in cre í ble del pan caliente y tomo té verde.
Escucho Jimmy Scott bajito para no despertar a nadie y escribo un cuento que me encargaron y que me da un loco placer escribir. Lo del pan es un pretexto para quedarme hasta tardísimo sola escribiendo.
Ememe, ese chico suyo que la lleva a Oviedo más que chico es un lord inglés, cuídelo que ya no quedan muchos. Los gustos en vida, que en el cielo seguro que te arreglan con sopa de verdura y vitina.
Sí, Tommy, me lleva a Oviedo y a donde quiera y me de gusto. Consentida, eso soy. También me lleva a Güerrin y a comer choripan a la ruta y a cualquier boliche que me encapriche (la rima no es casual). Si sólo me llevara a Oviedo sería un braguetón insoportable.
Qué tema las rimas internas, yo mañana (o sea en 11 minutos) quiero pegar en mi blog una frase muy linda que le escuché decir a la señora que fue la enfermera de Evita, pero resulta que se llama Nilda Cabrera, y entonces cuando después de la cita menciono a su autora como "Nilda Cabrera, su enfermera", la bendita rima interna tira al carajo toda la dignidad de la frase. Ya sé que es una nimiedad frente a la enormidad (ven, ahí fue otra rima) del tema, pero igual me molesta.
35 comentarios:
ememe sin vos
no hay fiestas
Hipólita
Y sin Tommy pobrecito?
Otra cosa (la influencia de A es más angustiante que la de Borges), yo me quiero mudar a lo de ememe y su chico para comer rico, mi dios, y no esa sopa de vitina y la sibarita con la que me arreglaron anoche.
tommy, no te imaginás lo bien que lo pasarías. Ayer hubieras estado todo el día leyendo y escribiendo, picoteando queso con pimienta con pan de tomates disecados y un syrah bastante rico. Después te hubiera dado chipá guazú con una salchicha alemana a la plancha bien doradita y de postre apfel strudel tibio con helado de vainilla. A la tarde hubieras seguido haciendo huevo, tomando café o té verde y a la noche te hubiera dado paltas con tomates y milanesas con queso derretido y arroz con gengibre. De postre helado de chocolate amargo y de dulce de leche. Antes de irte a dormir, mientras seguís leyendo repantigado en un sillón, te daría una copita de grappa, o de amarula. En verano te daría muchísimas ensaladas deliciosas, pero en esta época te engordaría con esas delicias. Me encanta dar rico de morfar. Ayer lo pasamos así con mi chico y agregados esporádicos de hijos que se sumaban en el almuerzo o en la cena. Ahora me voy a caminar una hora para quemar por lo menos el 10% de las calorías de ayer.
leer eso me dio mucho hambre.
todo para el no, Ememe, repartamos tantos manjares!
besos
Ana
plis plis plis como es ese arroz con jenjibre?
de nuevo Ana
Ese chico es muy afortunado, que no se descuide nunca, porque los que nos estamos anudando los cordones de los botines en el banco tenemos mucha hambre de gloria y de la otra, y por un apfel con helado a la hora de la siesta somos capaces de llenarle el bidón con valium.
yo tambien me quiero mudar a tu casa, es tan lindo que te cocinen con amor,quiero tener un chico
Raku
Raku, es lindo tener un chico y es lindo darle la papa y que te la coma toda.
Ana, va receta de chipá guazú. Es muy fácil:
2 cebollas, 4 choclos, media taza de queso recién rallado grueso, 100 gramos de queso mantecoso o muzzarella, 4 huevos.
Rallar los choclos hasta llegar al Marlon Brando. Dorar en aceite de oliga las cebollas cortadas chiquitas. Unirles los granos de choclo crudos y darles una cocinadita leve. salar. Pimentar. Dejar enfriar. Agregar el queso rallado, el mantecoso cortado muy chiquito y las 4 yemas previamente batidas. Aparte, batir a nieve las 4 claras. Agregar al final. Poner todo en fuente baja muy enmantecada. Al horno mediano una media hora. Queda como un soufleé de choclos. Guazú quiere decir "grande"y chipá "chipá", como todos saben.
Ah, me olvidaba del arroz con gengibre. Es más fácil todavía:
Cortar un buen pedazote de gengibre fresco como de 3 cms de largo.Pelarlo y cortarlo chiquito. Hacer lo mismo con un diente de ajo. Calentar aceite de oliga, echarle el gengibre y el ajo juntos. Dorar apenas. Poner dos tazas de arroz. Dorarlo un ratito (si algunos granos se queman es más rico). Echarles cuatro tazas de agua hirviendo y revolver bien. Sal y pimienta. Dejar que hierva destapado a fuego lento sin volver a revolver. Cuando la superficie está seca, es decir, cuando no quede agua visible encima del arroz (eso ocurre aproximadamente a los 10/12 minutos), tapar, poner el fuego al super mínimo y si hay, ponerle un disco de amianto o un difusor. Dejarlo así unos 5 o 6 minutos más, apagar el fuego y dejar tapado unos 5 minutos más. Destapar,ponerle aceite de oliga, revolvetear un poco. Se sirve enseguida o más tarde, recalentándolo en una sartén.
Todos los domingos elijo una receta de mi nuevo ídolo Martiniano, la recorto, y, haciéndome el distraído, la dejo al lado del anafe (esta palabra la aprendí la segunda vez que me mudé a la casa de la mujer que queremos tanto; la primera vez se esperaba y exigía menos de mí). Pero nada. El lunes a la noche, de nuevo albóndigas con arroz, y la mujer que que queremos tanto con sus verduritas y su botellita de Ser con té verde que me pregunta de nuevo: "¿En serio no te gusta el anco?"
Ufa. En el primer "de nuevo" debió decir "otra vez" y sobra un "que".
tommy,
a un hinchapelotas con la gramática como vos yo también le daría almóndigas con arroz todos los días.
Tommy,
me hiciste acordar a algo que pasó en un grupo de psicoanálisis al que iba hace mil años. No sé por qué, casi todos los pacientes de ese grupo eran médicos. Había un psiquiatra y psicoanalista muy gracioso, una especie de woody allen gordo, que rezongaba porque su mujer (psicóloga, claro), cocinaba pescado y él odiaba el pescado. pero lo odiaba mucho, le daba asco verlo, olerlo, y no podía ni probarlo. la muy hija de puta insistía una y otra vez con distintos modelos y recetas de pescados y le interpretaba que su aversión se debía a un conflicto con el falo del padre. Finalmente, el tipo se enamoró de una vendedora de una boutique de Cabildo, se separó de la psicóloga y nos contaba lleno de felicidad que la nueva le cocinaba cosas ricas y por supuesto jamás lo persiguió con un pescado.
coño y recoño!
a veces esta compu decide que me llamo violeta y se niega a reconocer que me llamo ememe.
Los dos últimos comments son míos.
Si el exito de un matrimonio radicara en lo rico que se come,... ¿Qué paso con M1, M2 y M3?
Otro gesto de amor a tus bloggers... esas recetas con sus fantasticos detalle! no sabes cuanto te las agradezco cuando la inventiva falla!
Manana busco los choclos y no paro hasta el "marlon"...
Ah y gracias a M4 porque ya sabemos que el arroz al ginger es su especialidad.
Gracias gracias de nuevo!!!
Ana
Ememe: LA NUEVA EVITA
Yo había pedido el chipá desubicadamente más abajo así que también se agradece.
Anonymous,
el éxito de un matrimonio no radica en lo rico que se come, sino en una fórmula química muy compleja que no pienso publicar.
Y yo no mido el éxito de un matrimonio por la duración sino por el placer que les da a los dos.
Sonamos, ya veníamos mal y esta tarde la señora uruguaya que cuida al niño cuya filiación no viene al caso desde que era un bebé y me cocina las ya mentadas albóndigas con arroz tres veces por semana rodó por la escalera y hubo que llamar a la ambulancia y le recomendaron dos semanas de reposo absoluto. Y yo sé que habla muy mal de mí comparar mi modesto infortunio con tremenda desgracia, pero díganme si no es muy triste que esta noche el único plato que me esperaba era sopero y el líquido en su interior eran un montón de verduras amontonadas, licuadas e irreconocibles. No, no, no, yo mañana me mudo a Pedemonte. Existe todavía Pedemonte, existen sus costillitas villeroy? Que alguien se apiade y me mienta que me gusta.
Tommy:
Si mal no recuerdo Pedemonte estaba de moda en los 70.
tommy,
creo que pedemonte todavía existe. Fui hace pocos años pero ya no es lo que era. El menenismo le pegó mal: se transformó en un lugar de nuevos ricos con corbata amarilla.
Recién vengo de Oviedo, que aunque cambió y tiene unas bolas de opalina horrendas como iluminación, sigue siendo riquísimo. Hoy, parrillada de pescados: mini pedacitos de pescados jugosos por dentro y crocantes por fuera y langostinos doraditos. Con Syrah.
No me puedo ir a dormir porque estoy esperando que termine de hacerse el pan integral con semillas de lino. Calculé mal y en lugar de programar La Máquina para que lo tuviera listo a las 8 la programé para las 2 de la mañana. Si lo dejo cocinado y encerrado se humedece y se achota. Mientras escribo huelo el olor in cre í ble del pan caliente y tomo té verde.
Escucho Jimmy Scott bajito para no despertar a nadie y escribo un cuento que me encargaron y que me da un loco placer escribir. Lo del pan es un pretexto para quedarme hasta tardísimo sola escribiendo.
Ememe,
quiero prontito probar tus panes y leer tu cuento.
Acá, traduciendo (loco aburrimiento), y sin olores a pan rico.
Besos!
Ememe, ese chico suyo que la lleva a Oviedo más que chico es un lord inglés, cuídelo que ya no quedan muchos. Los gustos en vida, que en el cielo seguro que te arreglan con sopa de verdura y vitina.
Me gusta cómo ignoraron el comentario malintencionado del anónimo. Mal-lechoso!
Sí, Tommy, me lleva a Oviedo y a donde quiera y me de gusto. Consentida, eso soy.
También me lleva a Güerrin y a comer choripan a la ruta y a cualquier boliche que me encapriche (la rima no es casual). Si sólo me llevara a Oviedo sería un braguetón insoportable.
Qué tema las rimas internas, yo mañana (o sea en 11 minutos) quiero pegar en mi blog una frase muy linda que le escuché decir a la señora que fue la enfermera de Evita, pero resulta que se llama Nilda Cabrera, y entonces cuando después de la cita menciono a su autora como "Nilda Cabrera, su enfermera", la bendita rima interna tira al carajo toda la dignidad de la frase. Ya sé que es una nimiedad frente a la enormidad (ven, ahí fue otra rima) del tema, pero igual me molesta.
De boliche en boliche y
de capricho en capricho
chocha vas con tu chico
¡Tu vida es un chiche!
A lo mejor "chipa" quiere decir quesito en guarani... alguien sabe?
Ana
En quechua
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